PARA VOSOTROS JÓVENES DEL MUNDO 

Compañeros, para estos tiempos que corren seguro que ya habréis escuchado frases del tipo, ‘esta juventud no vale para nada’ o ‘con estos niños el mundo se va a la mierda’ o esta que es “buenísima”: ¿estos son los que me van a pagar la jubilación?

Pues amigos, yo la verdad es que, si creo en esta juventud, en estas nuevas generaciones, y me río y discrepo de los adultos y mayores que escupen estas tonterías por la boca. A destacar, que ya han logrado que muchas veces dudemos de nosotros mismos y de nuestras supuestas carencias.    

Sin embargo, les digo como estudiante y joven que se equivocan, que somos una juventud que vale la pena, una juventud que trae unión y alegrías. Juntos hemos sufrido una pandemia, varias crisis, la actual inflación, y las continuas guerras, tanto militares como sociales, más toda la falta de oportunidades por no tener experiencia o considerarnos incapaces e inmaduros. Aún así con todos los palos recibidos seguimos adelante, sin prisa, pero sin pausa, cada uno cumpliendo con su labor, ya sea estudiando, trabajando, etc.

Para los que dicen que el mundo se va a acabar con nosotros, les aseguro que en su juventud no tenían este mundo tan difícil, competitivo y cambiante al que nos enfrentamos día a día y nos exige mucho más que a ellos en su momento. Para estas fechas, siguiendo el régimen establecido, como mínimo debemos tener una carrera universitaria, un máster y dominar dos o tres idiomas, y aún así no tenemos nada asegurado.

Aparte sufrimos un cambio climático provocado por nuestras anteriores generaciones, y a pesar de ello nosotros, ‘los inservibles’, somos los más concienciados y los primeros que a través de la acción queremos revertir esta situación.

Señores por este tipo de cosas creo en ustedes, jóvenes del mundo, inconformistas y rebeldes por naturaleza, que representáis el futuro de vuestra nación y queréis lo mejor para esta. Vamos a seguir con nuestro camino hacia un mundo mejor cumpliendo con nuestras funciones, y recordad a palabras necias, oídos sordos.

Por último, decirles que si una generación es mala es porque la anterior fue peor.

Juan Pablo Cardona.